Zurya Escamilla Díaz (Tlaxcala, 24 de julio de 2023) El estado de Tlaxcala es el segundo estado con mayor ocupación de servicios médicos con 57.2 por ciento de la población, informó el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) en su Estudio sobre el derecho a la salud 2023: un análisis cualitativo.
El documento publicado este lunes muestra que la entidad se ubica solo después de Coahuila -que obtuvo 57.6 por ciento- en cuanto a la población que recurre a servicios de salud; en consecuencia, Tlaxcala tiene el menor porcentaje de población que recurre a la atención de salud en servicios privados con 42.8 por ciento del total, de acuerdo al Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).
Resalta que a través del estudio identificaron casos donde desconocen los derechos de las personas usuarias en materia de salud que el personal médico y de gobierno busca remediar a través de diferentes estrategias; así lo muestra el testimonio de una persona entrevistada en la entidad. "Tiene como dos meses que a mi hija le dieron una tarjetita de no sé de qué, y de que es gratuito, y no he ido [...] es gratuito igual y todo, para los ojos, para la dentadura, para todo".
El CONEVAL muestra que hasta 2020, la tasa de afiliación a instituciones de seguridad social en el estado era de 30 mil 854 personas por cada 100 mil habitantes; en el ahora extinto Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI) de 39 mil 560 personas; en el IMSS-Bienestar o los Organismos Públicos Descentralizados era de 336; y en instituciones privadas de mil 150; mientras que la tasa de personas no afiliadas es de 26 mil 556 personas por cada 100 mil habitantes.
En el estado de Tlaxcala la encuesta fue aplicada a 14 personas en las localidades de Apizaco en el mismo municipio y San José Atotonilco en Tlaxco que fueron elegidos porque en 2020 tuvieron una razón de mortalidad materna igual a cero. A propósito, destaca que el estado fue de interés debido al convenio firmado por el gobierno del estado para la transición de los servicios del OPD Salud de Tlaxcala al IMSS Bienestar que abarcó únicamente la atención en el primer nivel, a diferencia de Baja California Sur, Michoacán, Nayarit y Querétaro donde también contempló el segundo nivel.
En este sentido, el personal identificó que fortalecer la disponibilidad hospitalaria y regularizar al personal de base son algunos alcances; entre los limitaciones, la centralización de servicios de salud, problemas para el traspaso de infraestructura y heterogeneidad entre las características socioeconómicas y demográficas de las regiones; mientras que los retos son la incertidumbre sobre su forma de operar, adaptación a zonas urbanas e infraestructura limitada para la atención generalizada.
Derivado de la encuesta, se observó que una de las principales limitantes para garantizar la provisión efectiva de médicos especialistas que para el estado lo asociaron con las condiciones de contratación y salarios, estimados en 200 pesos por jornada para una guardia de hospital de segundo nivel.
"Hay que venir de mañana para ser de los primeros que te atienden, después de las 10:00 de la mañana ya es un problema [...] nos faltarían médicos respecto de la ubicación de esta unidad médica", expresó una persona usuaria del servicio público de salud a los trabajadores del CONEVAL.
Por otra parte, reconocieron -junto a los participantes de Nayarit, Chiapas y Querétaro- que hubo acciones tanto para la remodelación como la rehabilitación de unidades médicas con recursos recibidos por el INSABI, así como el incremento de claves de medicamento y piezas recibidas en el estado. No obstante, también indicaron que la implementación de las compras consolidadas y la puesta en marcha de dicho instituto ha afectado la disponibilidad de los medicamentos.
"El incremento de pacientes aumenta el consumo de [medicamentos]; entonces hay temporadas en las que nos quedamos en cero de medicamentos de todo tipo en general, 15 o 20 días [para que lleguen los medicamentos]. Por lo mientras, el familiar tiene que estas comprando el medicamento, para aplicar sondas, vendas, guantes. Hasta suturas han tenido que comprar los familiares para que su paciente reciba la atención pertinente", expresó una persona servidora pública del ámbito estatal.
De acuerdo con el personal de salud de las entidades, destacó que el INSABI tuvo alcances como fortalecer la infraestructura médica y hospitalaria, contratación de personal humano y beneficios para la cobertura de claves de medicamentos; limitaciones su funcionamiento como un financiador más que como un servicio y que surgió en el contexto de la pandemia; mientras que los retos fueron la coordinación con las Secretarías de Salud, retrasos en la distribución de medicamentos y en la transferencia de recursos a las entidades.
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