Zurya Escamilla Díaz (Tlaxcala, 31 de mayo de 2023) El Estado mexicano debe trabajar en un sistema nacional de cuidados que garantice tanto a hombres como a mujeres desarrollarse plenamente en el ámbito profesional, pero también de los hombres y de las infancias, indicó María Eugenia Romero, activista de la organización "Equidad de género, ciudadanía, trabajo y familia".
En entrevista durante su visita a Tlaxcala el pasado 18 de mayo, recordó que históricamente la carga de cuidados ha recaído en las mujeres y ha limitado tanto su capacidad de desarrollo como oportunidades de trabajo; lo que se evidenció a partir del confinamiento a partir de la pandemia por Covid-19 debido a que en ellas recayó tanto las labores domésticas como el apoyo en las actividades escolares.
"Estamos trabajando en el sistema nacional de cuidados, primero tendrían que regresar las escuelas de tiempo completo y ampliarse. La primera infancia, hasta seis años necesitan cuidados especiales. Tienen que ampliarse las guarderías, tener servicios de calidad, deben tener gente absolutamente preparada, donde nosotros tengamos la confianza de que las hijas e hijos van a estar igual de bien o mejor que con las mismas mamás", indicó a medios de comunicación.
Por ello, la activista recalcó es responsabilidad de las instituciones públicas generar opciones gratuitas tanto para las trabajadoras asalariadas como para quienes laboran en la informalidad, realizan estudios, emprenden y en general para todas las niñas y niños; ya que bajo las condiciones actuales, parece un viacrucis para las madres pensar qué hacer con ellos cuando requieren destinar tiempo a alguna de estas actividades.
"Queremos una sociedad más justa, queremos una en que la que los hombres estén en corresponsabilidad con lo que les toca. No es que ayuden, también comen, tienen ropa, que asuman su responsabilidad, que el Estado también, que no nos den atole con el dedo, que los servicios sean de calidad, que sí se invierta, es una inversión. Se imaginan teniendo infancias felices, bien protegidas que están libres de violencia en las escuelas con una atención de calidad con pedagogas, psicólogas, sería realmente criar infancias plenas que después van a ser ciudadanos plenos", explicó.
No obstante, Romero también destacó que es responsabilidad de las empresas involucrarse en el tema al planear horarios lógicos tanto para mujeres como para hombres, reducir las jornadas laborales, puesto que ellos también afectados por los horarios extendidos bajo el pretexto de que no participan en el trabajo doméstico no remunerado; lo que deriva en explotación y les priva de tener una plena vida familiar.
"Los hombres tienen que darse cuenta que deben exigir este derecho y las empresas tienen que reducir los horarios laborales. La iniciativa de 40 horas me parece lo mínimo indispensable que se tiene que aprobar. Estamos buscando una mejor convivencia, espacios donde podamos compartir entre todas y todos los momentos, el trabajo, los cuidados. Eso es la vida, si lo podemos hacer entre todas y todos mejor", concluyó.
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