Zurya Escamilla Díaz (Tlaxcala, 9 de septiembre de 2022) El delegado estatal de la Confederación de Transportistas Mexicanos (CONATRAM), Pedro Carmona Zamora, denunció que la falta de regulación en los servicios de grúas y corralones implica un proceso largo para recuperar las unidad, lo que inhibe la denuncia de los transportistas afectados por la delincuencia.
"Ser transportista es estar loco, las placas son muy caras, los permisos son muy caros, los seguros son muy caros, lo certificaditos de no contaminación son muy caros, los físico-mecánicos son muy caros, las licencias valen más que el título de un profesionista, puro dinero a la Secretaría (de Comunicaciones y Transportes) y dónde está", dijo a medios de comunicación en conferencia de prensa.
De modo que, al contar las unidades con GPS y estar aseguradas, prefieren rastrearlas a través de las aseguradoras para recuperar el monto de lo robado, así como la unidad y ponerla a trabajar de nueva cuenta; pues de otro modo, el proceso para recuperarlo con denuncia de por medio puede tomar un mes o más.
Esto, señaló, debido a que ponerlo a disposición implica que lo trasladen a un corralón y el pago tanto de éste como de la grúa; además del costo que implica recuperarlo de la autoridad.
"Si se tuvieran los corralones por parte del gobierno y las grúas por parte del gobierno, si donde está la unidad robada llega la grúa del gobierno y la manda a su corralón, no nos cuesta nada; y si el gobierno nos apoya para la liberación, denunciamos todo, pero así solo vamos a beneficiar a terceros", explicó.
Además, señaló que aquellas unidades que sí son aseguradas por la policía no siempre son clasificadas y la Fiscalía General de la República (FGR) tiene que investigar en dónde se encuentra, para luego enviar a elementos para acreditar la propiedad y continuar con la carpeta de investigación.
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