Zurya Escamilla Díaz
“Cuando el cáncer se manifiesta es que ya está acabando contigo”, indica Magdiel, quien en septiembre de 2020 notó una protuberancia en uno de sus senos que de momento no la alarmó. “Al principio pensé que era un barrito. Pasó un tiempo y en una ocasión, cuando me hice la autoexploración, me di cuenta de que ya había crecido hacia dentro”.
En Tlaxcala, como en el país y en el mundo, el cáncer de mama es un grave problema de salud pública debido a que es la principal causa de muerte por cáncer entre mujeres con más de 20 años, refiere Tlahuicole Meneses Torres, encargado del Programa Estatal del Cáncer de la Mujer.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) dio a conocer recientemente que Tlaxcala cuenta con una de las tasas más bajas de muertes por cáncer de mama por cada 100 mil mujeres. Pero con 60 casos que en promedio se han diagnosticado en los últimos tres años y 42 que la Secretaría de Salud (SESA) ha registrado este 2021, el problema está lejos de minimizarse.
Magdiel es el nombre de una de estas mujeres tlaxcaltecas. Ella ahora puede compartir con Expediente Político.Mx que, tras haber detectado esa diferencia en su cuerpo, acudió al médico para realizarse un ultrasonido que arrojó la presencia de un tumor y luego una biopsia que determinó que era cancerígeno. No obstante, en 2020 hubo 56 mujeres que no pudieron contar su historia y hasta agosto de este año, 27 más perdieron la vida, de acuerdo con la dependencia estatal.
Ella ya había vivido una experiencia de cáncer con su padre, quien en dos meses perdió la vida por un tumor maligno en el hígado. Con esto en mente, cuando conoció de su diagnóstico supo que no había tiempo que perder para atenderse.
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